martes, 18 de diciembre de 2012

PROZAC 2.0.




Estimados prozaquianos y prozaquianas: hemos vuelto. Los que nos conocéis sabéis que el extasiante veneno de la música nos obliga a hacer cosas impensables como tropezar dos veces en la misma chica o   agitar la cocktelera del abuso para guillotinarnos las conciencias o incluso, simplemente, una salud ya de por sí menguante. Los que no nos conocéis tendréis la suerte de embarcaros en este viaje ingravitorio y sorprenderos de vez en cuando con nuestra poca diplomacia y abrumador sentido del rídiculo.

Este es un mensaje breve. Simplemente para informaros de que a partir de ahora somos un poco más maduros, aunque todos sabemos que algunas frutas están más ricas cuanto más verdes y ácidas, así que tampoco prometemos caer del árbol cuando nos lo exija la estación primaveral de la moral o de los corazones sensibles. En primer lugar, os invitamos a dar un paseo por nuestra web. Sí, una web, de esas con dominio comprado y acabadas en "punto com". Pronto apreciaréis las diferencias con el antiguo mundo Prozac. Más diseño y mismo criterio, barnizados los colores, imprimado el lienzo, catapultados al terreno celestial 2.0. que facilitará nuestro intercambio informativo, la interoperabilidad en un cosmos de avatares y pseudónimos y la colaboración, no consciente en nuestro caso, con el World Wide Web. Toda una incógnita disfrazada de Bill Gates y en orgiástico maremoto de interconectividad. Pero no se preocupen aunque no lo entiendan. Nosotros tampoco lo entendemos. Por intentar definirlo más claramente, una paja mental de aúpa como marco para mostrar lo que nos gusta. Así que vamos a hacer más vídeos que nunca y seguiremos colgando artículos cuando nuestro tiempo, nuestras chicas y nuestro cerebro se pongan de acuerdo y nos otorguen remansos de lucidez y paz, intelectualmente hablando. Tampoco vayáis a pensar que eso ocurre muchas veces. Y por último, no se olviden de seguir nuestra agenda, la cual intentaremos actualizar con eventos alejados de los circuitos oficiales, porque ya está bien de oficiales y caballeros, ha llegado el tiempo de los guerreros sin ojos en las cuencas, del arte revolucionario, de la contracultura y la música de verdad, no de esa que nos venden por ineptos y que te entra como te entra una paella del centro de Valencia, fácil y sin puta gracia. También recordarles que tenemos facebook y un twitter recién estrenado. Así que aquí empieza este nuevo viaje. El resto depende de ustedes.


La Redacción


martes, 11 de diciembre de 2012

CAVE


El 10 de octubre del 2012 era miércoles. Mucha gente se quedaría en casa pensando en sus cosas, en esos pequeños árboles de imágenes mentales y frases o audios que se posan en el fondo enfangado del hombre pensante, o estarían ilusionados con que llegase el jueves para ver a Chicote insultar, con razón, no digo que no, a algún desgraciado o despreciable encargado de restaurante. Muchos otros simplemente se irían a tomar una cerveza y a disfrutar de la anodina rutina del joven español medio parado. Afortunadamente algunos se vieron empujados por el interés y el buen gusto, por la psicodelia y el sopapo que el cuarteto de Chicago nos tenía preparado. Ocurrió en La Residencia y vinieron de la mano de La Cúpula del Trueno, que ya había traído hacía algún tiempo a Cooper Crain (teclados, sintetizador y guitarra) con su otro interesante proyecto Bitchin Bajas.

Pero eso es otro cantar. Para quien no conozca a Cave les diré que La Cueva lleva ya tres discos, varios EPs y singles con versiones, experimentaciones o ejercicios sonoros para todos los gustos. Tal vez su LP más conocido sea Psychic Psummer (Important Records, 2009), el cual aunaba psicodelia bailona, trote desbocado y mucha naturalidad para hacer temazos, pónganse Made in Malaysia y entenderán lo que les digo. Pero es imprescindible ponerse en un coche a toda tralla el primer tema de su disco Hunt Lick Devil/Jamz (Permanent Records, 2009), tema que tiene ese mismo nombre, para darse cuenta de que si le das a Cave una carretera y algo de tiempo te van a machacar los oídos con gusto y no vas a querer llegar a tu destino.

En el vídeo que os dejo podéis recrearos durante 17 minutos con This is the best, de su último disco Neverendless (Drag City Records, 2011) porque como os digo, en esos temas de instrumentaciones largas y pocas palabras, es donde estos tíos no te sueltan. Muchos de los que estuvieron allí ese día opinan que ha sido uno de los mejores conciertos que han visto este año. Yo opino lo mismo.





Puchi Petruchi